Desde que la pandemia del COVID-19 comenzó hace más de un año, se ha estado trabajando incansablemente para desarrollar y distribuir una vacuna efectiva contra el virus. Con el surgimiento de nuevas variantes del virus, especialmente la variante Delta altamente contagiosa, muchos se preguntan si las vacunas actuales siguen siendo efectivas. En este artículo, exploraremos lo que sabemos sobre las vacunas y la variante Delta y qué medidas se están tomando para proteger a la población contra la propagación del virus.
Actualmente, hay tres vacunas aprobadas para su uso contra el COVID-19: Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson. Las tres vacunas se han demostrado seguras y efectivas en ensayos clínicos y se han administrado a millones de personas en todo el mundo. Las vacunas de Pfizer y Moderna utilizan una tecnología de ARN mensajero (ARNm) para desencadenar una respuesta inmunitaria y prevenir la infección por COVID-19. La vacuna de Johnson & Johnson utiliza un vector viral para desencadenar una respuesta inmunitaria. Todas las vacunas requieren dos dosis, excepto la vacuna de Johnson & Johnson, que solo requiere una.
La variante Delta se identificó por primera vez en India en diciembre de 2020 y se ha extendido rápidamente por todo el mundo. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la variante Delta es más transmisible que las variantes anteriores y puede causar síntomas más graves en personas no vacunadas. La variante Delta ha superado a otras variantes en muchos países y se espera que sea la variante predominante de COVID-19 en todo el mundo en un corto plazo.
A pesar de que la variante Delta es altamente contagiosa, las vacunas COVID-19 actuales todavía son efectivas contra ella. Los estudios muestran que las vacunas Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson son efectivas para prevenir enfermedades graves, hospitalizaciones y muertes causadas por la variante Delta. Sin embargo, las vacunas pueden ser menos efectivas para prevenir la infección leve o moderada por la variante Delta. Un estudio del Reino Unido encontró que la vacuna Pfizer era un 88% efectiva contra la variante Delta en la prevención de enfermedades graves que requieren hospitalización, mientras que la efectividad contra la infección leve o moderada era del 33%. Se necesitan más datos y estudios para determinar la efectividad de las vacunas contra la variante Delta.
A pesar de que las vacunas pueden ser menos efectivas contra la variante Delta en prevenir la infección leve o moderada, es importante recordar que las vacunas COVID-19 siguen siendo la mejor herramienta que tenemos para prevenir enfermedades graves, hospitalizaciones y muertes por COVID-19. Las personas completamente vacunadas tienen menos probabilidades de enfermarse gravemente o morir a causa del COVID-19, incluso si se infectan con la variante Delta. Además, la vacunación ayuda a prevenir la propagación del virus a otras personas, especialmente a aquellos que no pueden vacunarse debido a razones médicas.
Además de vacunarse, existen medidas adicionales de precaución que pueden ayudar a prevenir la propagación del COVID-19. Los CDC recomiendan que las personas sigan practicando el distanciamiento físico y el uso de mascarillas en interiores. Las personas también deben lavarse las manos con frecuencia y evitar grandes reuniones en lugares cerrados. Aquellos que muestren síntomas de COVID-19 deben hacerse la prueba y aislarse de inmediato para evitar la propagación del virus.
Es probable que la variante Delta continúe propagándose en todo el mundo, pero las vacunas COVID-19 actuales siguen siendo efectivas para prevenir enfermedades graves, hospitalizaciones y muertes. Las personas completamente vacunadas tienen menos probabilidades de enfermarse gravemente o morir a causa del COVID-19, incluso si se infectan con la variante Delta. Además, seguir las medidas de precaución adicionales puede ayudar a prevenir la propagación del virus. Continuaremos aprendiendo más sobre COVID-19 y la variante Delta a medida que evoluciona la pandemia, pero es importante seguir vacunándose y tomando medidas de precaución adicionales para proteger nuestra salud y la salud de los demás.