Introducción
Desde que el coronavirus apareció por primera vez en Wuhan, China a finales de 2019, ha sido un tema central en todos los medios de comunicación a nivel mundial. A medida que la pandemia continúa afectando a personas de todo el mundo, se están descubriendo constantemente nuevos síntomas y efectos secundarios, lo que hace que entender el virus sea aún más importante. Uno de los síntomas que se ha vuelto cada vez más común es la fiebre alta y duradera, que puede ser alarmante para las personas que la experimentan. En este artículo, analizaremos qué significa tener una fiebre alta y duradera, por qué ocurre y qué debemos hacer si experimentamos este síntoma.
¿Qué es la fiebre alta y duradera?
La fiebre se define como una temperatura corporal elevada que indica que nuestro cuerpo está luchando contra una infección o enfermedad. Normalmente, se considera que una temperatura de 37,5°C o más es fiebre, aunque esto puede variar ligeramente dependiendo de la persona y la hora del día. La fiebre alta y duradera se refiere a una temperatura corporal que se mantiene a niveles elevados durante varios días, a pesar de las medidas convencionales para reducirla, como descansar, beber líquidos y tomar medicamentos.
¿Por qué ocurre la fiebre alta y duradera?
La fiebre alta y duradera puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo infecciones virales y bacterianas, enfermedades autoinmunes, cáncer y trastornos del sistema nervioso central. En el contexto del coronavirus, la fiebre alta y duradera es un posible síntoma de COVID-19. La fiebre puede ser causada por la respuesta inmune de nuestro cuerpo al virus, que libera proteínas como la interleucina-6 (IL-6) y el factor de necrosis tumoral (TNF), lo que puede desencadenar una cascada de reacciones inflamatorias.
¿Cuánto tiempo puede durar la fiebre?
La duración exacta de la fiebre puede variar de persona a persona, pero normalmente dura de tres a siete días. Sin embargo, en algunos casos, puede durar más tiempo y convertirse en fiebre alta y duradera. Esto puede aumentar el riesgo de complicaciones a largo plazo, incluyendo daño a los órganos y la aparición de otros síntomas graves.
¿Cómo podemos manejar la fiebre alta y duradera?
En primer lugar, es importante recordar que la fiebre es un síntoma y no una enfermedad en sí misma. Esto significa que tratar la fiebre no siempre es necesario, especialmente si es leve y se acompaña de otros síntomas leves. Sin embargo, si la fiebre es alta y persistente, es recomendable buscar atención médica para determinar la causa subyacente.
Para las personas con fiebre leve, se recomienda descansar y beber líquidos para prevenir la deshidratación. Los medicamentos antipiréticos, como el paracetamol, también pueden ser efectivos para reducir la fiebre. En algunos casos, los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como el ibuprofeno, pueden ser útiles, aunque se recomienda precaución al utilizarlos debido a los posibles efectos secundarios.
Conclusiones
La fiebre alta y duradera es un síntoma común de muchas enfermedades, incluyendo COVID-19. Si experimenta fiebre alta y persistente, es importante buscar atención médica para determinar la causa subyacente y el tratamiento adecuado. Descansar, beber líquidos y usar medicamentos antipiréticos pueden ser efectivos para reducir la fiebre, aunque siempre es mejor consultar a un profesional médico antes de tomar cualquier medicamento.
Mantener las prácticas de higiene, como lavarse las manos con frecuencia y mantener una distancia social adecuada, siguen siendo la mejor manera de prevenir el coronavirus y otras infecciones. Si experimenta un síntoma grave o de emergencia, como dificultad para respirar o dolor en el pecho, busque atención médica inmediata. Juntos podemos detener la propagación del coronavirus y mantenernos saludables.